Estos días navideños nos inundan con propagandas de beneficiencia para ayudar a niños con hambre, niños desnutridos, etc.. Y no puedo dejar de pensar en lo mismo; vale, yo tengo compasión, pero lo de alimentar a un niño pobre. en un sitio pobre y sin ninguna salida, para que se haga un hombre, que a su vez tenga muchos más niños con el mismo problema... como que no me parece solución.
Sé que es políticamente incorrecto quizás, pero para esto este blog, digo lo que pienso, sin hipocresías. Y hasta que no haya un plan de "control de natalidad", no me parecerá ninguna solución ayudar a un niño para que siga creciendo, muera de hambre más tarde, o conciba más niños para que sufran.
Qué queréis que os diga, me parece absurdo y en ciento modo inhumano. Es como calmar nuestras conciencias ayudando a un mal mayor.
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